A veces cuando pienso en ellas me dan ganas de llorar.
Porque las siento solas. En realidad ninguna de nosotras lo está, pero ya no estamos juntas.

La una ya es madre y tiene una relación "estable" que tal vez no ha llegado hasta donde ella quiere pero no está ninguna de nosotros cerca, para tomar té, cafecito, platicar y reír mucho muchote.... Algo se fracturó hace unos años y he sido la única que ha mantenido el hilo...

La otra está sola, haciéndose a la idea de mudarse, de vivir sola y aceptar que está sola. Divorciándose y aunque hay otros para sostenerla, no somos nosotros para oírla reír, llorar, hacer de cuenta que no pasa nada y gritar enojada porque le duele haber creído.

La última cumpliendo un sueño pero sin tener a nadie real con quien compartirlo. Muerta de miedo y felicidad que se contrapone con la soledad de tener en la distancia a la gente que se quiere tener cerca.

Y yo, acá, feliz pero extrañándolas horrible.
Mis amigas del alma, mis sis, las mejores amigas que tendré toda mi vida.
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